Cuando creía que había quedado atrás el leer libros en la clandestinidad como "La Madre" de Máximo Gorki, o "Carta al general Franco" de Fernando Arrabal, o tantos otros que teníamos que leer en la clandestinidad del hogar para no sufrir las consecuencias del dictador, me desayuno hoy, con que la excelentísima miembra del más que raro, rarísimo, ministerio de igualdad, pretende que desparezcan los cuentos como La Cenicienta, Caperucita roja o Blancanieves, y todo porque le parecen sexistas, como diría aquel “manda huevos”, con perdón. Se ve que no tiene grandes problemas a que atender, sobre todo si tenemos en cuenta que la miembra no tiene ningún problema para llegar a fin de mes, que digo fin de mes, fin de milenio si fuese preciso.
Es cuestión de tiempo que dichos cuentos tengan que leerse en voz baja a los críos en su habitación, y añadirán casi con seguridad Pinocho, seguramente porque es un cuento que delata a algunos políticos con mucho poder, e incluso partidos.
Mientras tanto, el pueblo al paro, todo un ejemplo de igualdad, hombres y mujeres hacen interminables colas, y se desesperan por igual, pero esto no es importante, para eso está el gobierno y nos da una limosna para mantenernos como muertos vivientes.
Por no extenderme más, solo pido que “La miembra” no se acuerde de las "Novelas Ejemplares" de Miguel de Cervantes, el "Pigmalión" de George Bernard Shaw, o "La pequeña cerillera" de Hans Christian Andersen, y otras miles de obras inmortales que todos tenemos en la memoria, ya que si por desgracia es iluminada por no se sabe que luz, también irán al mismo saco, y con el tiempo creará una relación de obras literarias a las que habrá que quemar, ya que ella y solo ella tiene la luz para decir que tenemos que leer y que no.
¡Por dios! ¿Es qué no hay nadie con algo de sentido común cerca de ella?
Julio
Es cuestión de tiempo que dichos cuentos tengan que leerse en voz baja a los críos en su habitación, y añadirán casi con seguridad Pinocho, seguramente porque es un cuento que delata a algunos políticos con mucho poder, e incluso partidos.
Mientras tanto, el pueblo al paro, todo un ejemplo de igualdad, hombres y mujeres hacen interminables colas, y se desesperan por igual, pero esto no es importante, para eso está el gobierno y nos da una limosna para mantenernos como muertos vivientes.
Por no extenderme más, solo pido que “La miembra” no se acuerde de las "Novelas Ejemplares" de Miguel de Cervantes, el "Pigmalión" de George Bernard Shaw, o "La pequeña cerillera" de Hans Christian Andersen, y otras miles de obras inmortales que todos tenemos en la memoria, ya que si por desgracia es iluminada por no se sabe que luz, también irán al mismo saco, y con el tiempo creará una relación de obras literarias a las que habrá que quemar, ya que ella y solo ella tiene la luz para decir que tenemos que leer y que no.
¡Por dios! ¿Es qué no hay nadie con algo de sentido común cerca de ella?
Julio