martes, 23 de septiembre de 2008

La batalla se libra en mi interior




Hablo de mí, y no hablo de mi... Solo soy uno, un miembro de la especie, con mis deseos, luchas, miedos, victorias y derrotas. Siempre en pié de paz con mis semejantes.

Hoy, como muchas mañanas, asumo mi rutína diaria... Como a menudo me ocurre, en los últimos tiempos, me levanto con mucha diligencia y pocos ánimos.

Los últimos tiempos nos traen muchas "novedades" que no son tales... A sabér:

Miles de niños utilizados como carne de cañón en las guerras que luego han de ser "rehabilitados", mortalidad deliberada (guerra, terrorismo "normal" y de estado, delincuencia, violencia de género o familiar, violencia racista o por "diversión",...), abuso de poder económico o "político", corrupción...

¿Donde está ese famoso "ser humano"?¿Cuales son esas "sus" hipotéticas virtudes que solo he visto en los libros...?¿Será que "humano" es adjetivo admisible asimilable a virtud, bondad,...?

Creo que siempre, cada día, amplios horizontes se abren ante nuestros ojos y en las últimas décadas nos hemos quitado las gafas de ver de lejos... Donde no hay esperanza, donde no se ve futuro, no se puede caminar con decisión hacia una meta.

En tiempos pasados, como en los presentes siempre ha habido metas visibles: Dinero, poder, conocimiento, crecimiento espiritual (en el sentido de la tendencia hacia un bien común, una universalización de la justicia, que no solo del cumplimiento de la ley...).

Parece ser que el ser humano en los últimos tiempos solo puede ver como meta el dinero y el poder. El conocimiento, como sociedad, solo es una camino hacia la obtención de dinero y poder. El crecimiento espiritual ha sucumbido ante los objetivos mezquinos de las ideologias en su camino hacia el poder y el dinero.

Repito... ¿Donde está el ser humano...? ¿Cual es esa famosa esencia que buscan desde hace siglos poetas, filósofos y líderes religiosos...? Yo no consigo verla...

No, no es que no esté ahí, está en ese camino que emprendemos en la niñez, con la educación de unos padres que nos enseñan que el ser humano ha de compartir, ser amable, educado, considerado, justo,... ¿Es la evolución hacia el edad adulta el camino hacia el egoismo, la agresividad, la mala educación, la desconsideración, la injusticia,....?

Al llegar a cierta edad hemos de tomar decisiones, correr riesgos, asumir pérdidas...

Cada amanecer, cada puesta de sol...son un reto, una lucha, una victoria o una derrota que hemos de asumir, como batallas ganadas o perdidas en una larga guerra, ante la perspectiva de una noche insomne.

Yo, desde aquí, en el interior de aquello que llamamos mente..., me niego a una larga noche insomne... Procuro que cada acto, cada minuto de mi vida me lleve a una noche tranquila... Que aquello que me haya de quitar el sueño sea la asunción de mis pérdidas como precio para mantener mi ética en pié, hermanada con mis hechos.

Desde aqui, en esta tribuna ante una sala vacía, cuyos visitantes solo van de paso en su largo camino hacia el sueño que no ha de tener fin, prometo que jamás cejaré en esta batalla.

Desde aquí os pido, fuera de toda ideología política, religiosa,... Tened FE. Aquello a lo que contribuyais con vuestros actos en conciencia de cada día, desde la acción decidida, será el mundo que un dia con suerte pisarán vuestros hijos...

Yo creo en el ser humano, por eso cada día enseño a mis hijos que jamás han de cejar en la batalla, por eso jamás me rindo, sigo manteniendo mis objetivos incluso tras cada derrota..., a pesar del miedo más grande, aquel que solo puede surgir ante la posibilidad de perder lo mas querido.

Cada decisión en cada encrucijada es una batalla que se gana o se pierde, la vida es una guerra dentro de la paz que solo termina con la muerte... ¿Alguien de los que me lee está ya muerto...? ¿No? Pués a la batalla que el camino hacia un mundo mejor se abre ante nuestros ojos... Pon tu grano de arena y algun día alguien pondrá el penultimo... El último solo la naturaleza puede ponerlo a nuestra especie. Toda muerte, incluso la de las especies es naturál..., así sea por la propia mano...

Desde esta arena por nosotros, la humanidad, quedo velando mis armas, siempre presto a la batalla incruenta de la palabra por un objetivo, el mañana...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

yo apuesto a que alguno de los que leen sí está muerto: la muerte es la falta de fe en la libertad

un saludo

Marinel dijo...

Me han encantado estas reflexiones no exentas de tristeza, de algo de pesimismo(o mucho), de temor, y sin embargo de ansia por andar un camino recto, un camino en el que sembrar y recoger flores en lugar de arrasarlo.
Creo con sinceridad que tener Fe, es harto difícil en la sociedad en la que vivimos.Que el camino recto que idealizamos en la niñez, se bifurca en tantos que acabamos en una especie de laberinto con cantidades ingentes de muros que nos hacen retroceder o chocar con el consiguiente dolor físico y moral.
No obstante, yo, tampoco cejo en mi empeño de alegrar mi camino, de regarlo de amor con la esperanza de que las flores germinen, que crezcan y lo embellezcan.
Quiero dejarles algo más hermoso a mis hijos a parte de la esperanza...
Un beso.