miércoles, 22 de octubre de 2008

Una nueva era.

Estoy cansada de transgredir las leyes de la felicidad y caer en el lodo.

Estoy agotada de no dar una oportunidad al optimismo.
Estoy abotargada de sumirme en el meollo del malestar sempiterno.

Y quiero renacer a la sonrisa, a la risa espontánea, al ambiente acogedor.

Deseo con ahínco nadar contracorriente y salir a flote.
Ambiciono denodadamente irradiar energía positiva a mi alrededor.

Que el mundo sea como un pez saltarín que se escapa constantemente de ser presa fácil para el desánimo o el horror.

Ansío dejar atrás los lastres del materialismo compulsivo y subirme al tren de la alegría despojada de eso que asfixia, agarrota y nos hace menos humanos.

Necesito imperiosamente relegar el dolor producido por la desolación y renacer cual Ave Fénix de las cenizas que se van amontonando a consecuencia de la tristeza o el miedo.

Lo necesito tanto como el aire que respiro. Y si todos nos lo propusiéramos al unísono, el mundo habría entrado en una nueva era: la era de la verdad.

Sí, sé que es una utopía…

6 comentarios:

Andrés Paredes dijo...

Hola, Marinel.
Vamos a empujar todos con fuerza, a ver si apartamos la tormenta y sale el sol.
Un beso.

Marinel dijo...

Vengaaaaaa, que así sea.
Un beso,Andrés.

Anónimo dijo...

"you may think i'm a dreamer, but i'm not the only one" (lennon en "imagine")

no es una utopía, marinel

s

CharlyChip dijo...

Siempre en la brecha, algo cambiaremos.

La actitud es la mitad de la victoria.

Nunca ha de faltar una sonrisa, vale mucho y no cuesta nada.

Un besote

Marinel dijo...

Santiago,"imagino" que no soy la única soñadora y que mis deseos se hacen realidad...
Un beso.

Marinel dijo...

Eso haremos,Carlos, seguir en la brecha y sonreír y reír mucho...
Un beso.