miércoles, 3 de diciembre de 2008

Por ellos...

Vivimos en un mundo cruel, el fruto mezquino de los detritus de la naturaleza humana...

Aquí vinimos, nadie nos preguntó, somos el fruto de la esperanza en el futuro, la creencia en que mañana será mejor que hoy y en lo mismo hemos convertido a nuestros hijos al sumergirlos en el delirio de la naturaleza humana.

Para bien o para mal estamos aquí, están aquí...

Por ellos luchamos cada día, peleamos para conseguir el sustento, intentamos cambiar el mundo para mejor...

Cada nuevo año, cada nuevo día es una oportunidad, ¡Aprovéchalas!¡No dejes escapar una!

En navidades paramos el mundo, centramos la atención en los nuestros... En los que están cerca, en los que están lejos...

Tal vez no podamos cambiar mucho del mundo pero podemos amar, amar sin límites y darnos por entero a quienes amamos sin condiciones.

2 comentarios:

Marinel dijo...

Así sea,Carlos...
Me ha encantado esta reflexión tan íntima y personal...
Por ellos, sin duda.
Besos.

Andrés Paredes dijo...

Hola, amigos.
Cambiar el mundo es una tarea ardua y difícil sino imposible.
Con tener en orden nuestro pequeño universo cercano ya es bastante.
De aquí a extenderlo a nuestro alrededor es un paso que hay que dar cada día con mucho esfuerzo. Algunos todavía son muy reacios a extender la mano a los demás.
Un saludo, amigos.