domingo, 8 de marzo de 2009

Tu DNI el mejor aliado de los delincuentes.


En caso de robo o pérdida del DNI tienes obligación inmediata de solicitar un duplicado.

Noelia Carmena, una joven de 21 años a la que le robaron el DNI en 2006 estuvo detenida casi 24 horas y fue juzgada por los delitos de suplantación de personalidad, estafa y falsificación de datos.

Noelia se enteró de que se había casado dos veces, y que supuestamente había cobrado 3.500 euros por ello.

Todo comenzó en un trayecto del metro de Madrid, alguien le sustrajo el abono de transporte junto al DNI.
Un tiempo después cuando acudió a solucionar unos papeles de empadronamiento le informan que tiene abierto un proceso judicial en el que se le acusa de suplantación de personalidad, estafa y falsificación de datos (supuestamente por un matrimonio de conveniencia para que un inmigrante obtuviera la residencia).

Como haría cualquier buen ciudadano, sin nada que temer ante la justicia, Noelia se dirigió a la comisaría más cercana donde fue detenida, esposada y metida en un calabozo con otros delincuentes (incluidos hombres, algo que está prohibido y que ella denunció, pero que no fue admitido por el juez por falta de pruebas), este punto hay que tenerlo en cuenta recordad; si por alguna casualidad, caemos en el calabozo, hacer fotos de recuerdo con los compañeros de celda.

Allí permaneció desde su ingreso por la tarde hasta la madrugada cuando fue trasladada a otras dependencias hasta que, a la mañana siguiente, compareció ante el juez.

Debía demostrar que no había tomado parte en esa boda, ni había suplantado la identidad de nadie.

El magistrado decretó libertad condicional, con la obligación de pasar por el juzgado a firmar los días 1 y 15 de cada mes.

Aquí no acaba la increíble historia.

Una tarde, se presenta una persona en su casa reclamando que cumpliera lo pactado, el individuo aseguraba que se había casado con un familiar suyo y que todavía no había conseguido la nacionalidad española.

Que ellos habían pagado 5.700 euros, y que supuestamente 3.500 eran para Noelia (que no estuvo presente en el enlace porque era muy tímida y no quería que se enteraran sus padres, según alegaron los integrantes de la mafia).

"Está claro que va a seguir pasando hasta que no recuperen mi DNI"

Noelia denunció los hechos a la Policía, y la respuesta fue contundente: "Como se están realizando actividades fraudulentas con tu DNI, puedes tener más problemas, así que te aconsejo que no denuncies".

Lo más absurdo que te puede decir la policía; "Como se están realizando actividades fraudulentas con tu DNI, puedes tener más problemas, así que te aconsejo que no denuncies".

Parece ser que la misma Policía admite que no sirve para nada denunciar el robo y uso fraudulento del documento obligatorio más importante que deben tener todos los ciudadanos.

Así que ya sabéis el nuevo DNI electrónico será una maravilla pero si te lo roban puede convertir tu modélica existencia en un infierno de procesos judiciales. Mientras los delincuentes hacen sus fechorías impunemente con tu identidad.

Estas son algunas de las cosas que le pueden suceder a un ciudadano honrado y legal.

Todo esto en la era de la informática donde pueden embargarte una cuenta por impago de tributos y multas pero no bloquear un DNI robado.

Noelia no se podía imaginar que el robo de su DNI le iba a producir tantos quebraderos de cabeza cualquiera de nosotros puede ser el siguiente, la pérdida o robo del documento, si cae en manos de unos delincuentes profesionales, puede pasar de un molesto problema a cambiar y quizás arruinar tu vida.

Leer este otro caso;

"El robo del DNI destroza su vida"



1 comentario:

CharlyChip dijo...

¿Cuantos instrumentos del estado son armas de doble filo...?

Muchos, creo yo. Cada vínculo con el estado es una atadura a la burocracia, un lastre que nos hunde, un ancla que impide que volemos...

No quisiera yo estar en la piel de esta mujer.

Esta es una de tantas muestras de que la privacidad, el anonimato son la mejor defensa en cualquier tiempo y lugar.

La notoriedad es un arma de doble filo.

Un abrazo